¿HAY QUE RESPETAR LAS COSTUMBRES?

Las costumbres son tradiciones realizadas por una sociedad que según su punto de vista las consideran como buenas, pero que desde el exterior pueden verse de una manera distinta. Sí está en nuestra labor respetar las costumbres de otras sociedades, como es el caso de la diferencia de religiones que existe en nuestro país. Cada una tiene sus festejos y usos. Pero éstas pueden influir en las nuestras. Acabando por juzgarse entre sí.

Un ejemplo para la frase anterior es el siguiente: recientemente se ha publicado la noticia de un intento de cancelación del festival de Navidad en un colegio público de Zaragoza debido a las diferentes religiones que se mezclan en él. También existen costumbres que están influyendo tanto en nuestra cultura, que acabaremos por hacerlas nuestras. Por ejemplo, es el caso de la tradición de Haloween procedente de los países anglosajones, así como la visita de Papá Noel el día 25 de diciembre. Estas fiestas se celebran continuamente, año tras año...... Son un par de tradiciones que no tienen que ver nada con nosotros y cuyos orígenes proceden de otros lugares. ¿Acaso no nos sirve con el Día de todos los Santos o la llegada de los Reyes magos?

Las costumbres se pueden considerar, según en qué consistan, como buenas o malas. Para nosotros, las costumbres que conocemos hoy en día y que pertenecen a otras sociedades no son muy bien vistas. Por ejemplo, en Bombay no es costumbre enterrar a los muertos, sino que los buitres se comen los cadáveres. Eso sería para nosotros algo cruel el dejar a los animales que se alimenten del difunto, pero desde la sociedad que lo practica es algo normal. Incluso en el pasado las costumbres de otras sociedades tampoco fueron aceptadas. Cuando Hernán Cortés conoce a los aztecas no puede evitar alarmarse al ver sus rituales: esta civilización cogía a sus prisioneros y con una piedra les sacaban el corazón y cortaban las piernas, arrojándolos después al interior de sus pirámides. Hernán Cortés decide entonces hacer una hoguera en la que los caciques son quemados. Ahora son los aztecas los que quedan impresionados por la actuación de Cortés.

La conclusión es, que las costumbres que cada uno tenga pueden respetarse siempre y cuando no atente contra la dignidad humana. Puede ser que haya grupos que las consideren inapropiadas, pero desde el punto de vista de la sociedad que las realiza son buenas acciones. Nosotros también, aunque algunos no se den cuenta, criticamos nuestras propias costumbres.

Alejandro C.H. 4º ESO A.